Animales Terrestres
A diferencia de las especies marinas, los animales terrestres hacen vida en su totalidad en la superficie. Específicamente, son aquellos animales que viven en la superficie continental de la Tierra, encontrándose múltiples especies cuya adaptación, evolución y estilo de vida están determinadas lejos de las grandes masas de agua.
Para empezar, hace miles de millones de años, cuando la Tierra adquirió su química y dinámica física más o menos como la conoces ahora, la vida comenzó a florecer en el mar, en un lento proceso.
Luego, fue trasladándose a la superficie terrestre de forma lenta, pero progresiva, hace unos 600 millones de años, aproximadamente. Esto sucedió cuando las primeras plantas empezaron a florecer y a desarrollarse fuera del ámbito marino.
Así, 70 millones de años después de este acontecimiento, las especies animales empezaron a poblar la superficie de la Tierra, comenzando con artrópodos de gran tamaño y algunos vertebrados óseos. Si bien en sus primeras fases utilizaban la superficie terrestre como un campo de transición entre hábitats marinos, la alimentación empezó a cambiar las cosas.
Además de la alimentación, el vasto territorio de tierra firme y la competencia brutal que se hallaban en los mares y océanos primigenios, fue probablemente uno de los motores de la aparición y evolución de la vida fuera del mar. Este proceso mediante el cual los animales se adaptaron a la vida en la tierra seca se le llama terrestralización.
En la época actual, los animales terrestres tienen un porcentaje realmente importante en la vida sobre el planeta Tierra, estas formas de vida son tan variadas como los animales acuáticos o marinos, concentrándose la mayor parte de ellos en selvas tropicales y bosques.
No obstante, muchas especies se han adaptado a diversas regiones y climas de todo el mundo, casi en su totalidad.
¿Qué características poseen los animales terrestres?
Los animales terrestres son muy distintos entre sí, clasificándose entre intrincadas familias, especies y subespecies.
Sin embargo, todos comparten ciertas cualidades básicas en cuanto a la adaptación en los medios terrestres, muy a pesar de que esta adaptación se haya hecho a partir de diferentes órganos y herramientas específicas de estos animales.
Respiración
Los animales terrestres ya no poseen las primitivas branquias de sus antepasados marinos y las que comparten ciertas especies modernas. En cambio, han desarrollado procesos de respiración mediante el intercambio directo de gases, extrayendo el oxígeno del aire mediante órganos especializados, llamados pulmones, tráqueas e incluso, algunas especies respiran a través de la piel.
Cuerpo esquelético robusto
Disponen de esqueletos fuertes y robustos; en el agua, el cuerpo pesa menos y no necesitan de esqueletos óseos para sustentar las estructuras corporales de los animales. En cambio, los animales terrestres sí requieren un conjunto de huesos para sostener las extremidades y todo su organismo.
Si se trata de los artrópodos, son animales que tienen un exoesqueleto y los vertebrados tienen un endoesqueleto. Una excepción a la regla de algunos animales terrestres invertebrados, son las lombrices de tierra.
Sentidos que están adaptados a ambientes secos
Los sentidos de estos animales están desarrollados para que interactúen con el aire. Siendo el oído, el olfato y la vista indispensables para reconocer algún peligro o para cazar a sus presas.
Estos sentidos están desarrollados para que puedan adecuarse al aire, en donde las ondas de sonido viajan lentamente y en donde hay más luz que en el fondo marino, por ejemplo.
Imposibilidad de desecación
La superficie terrestre es un lugar en donde se pierde humedad en vez de ganarla. Por esta razón, los animales terrestres se han adaptado para desarrollar pieles que impiden el escape de humedad o bien, han desarrollado mecanismos para mantener la humectación del organismo.
También, la evolución ha dotado a las especies terrestres de pluma, pelos y demás para protegerlos del frío y del calor. Los animales ovíparos adaptaron los huevos con cascarones resistentes que impiden el escape de los líquidos interiores.
Alimentación de los animales terrestres
Los animales terrestres poseen diversas formas de alimentación, por lo cual son seres estrictamente consumidores. Según lo que comen, pueden clasificarse en: herbívoros, son animales que se alimentan exclusivamente de plantas.
Los animales carnívoros se alimentan de carne de otros animales y los animales omnívoros comen una combinación de alimentos vegetales y animales por igual.
Reproducción de los animales terrestres
La reproducción de estos animales se produce mediante la fertilización de huevos o mediante el desarrollo embrionario, después de la copulación. Si se tratan de especies que ponen huevos, se habla de animales ovíparos. Los animales que nacen vivos, son los llamados animales vivíparos.
Los artrópodos, reptiles, aves, peces, moluscos son especies ovíparas, pudiendo encontrarse dos tipos de fecundación: la interna y la externa. Los animales vivíparos tienen especies como los mamíferos, entre los que se encuentran elefantes, ballenas, perros, gatos, leones, vacas, primates, entre otros.
Biomas y hábitat de los animales terrestres
Los biomas son las zonas del planeta que tienen climas más o menos similares, los biomas están constituidos por grandes agrupaciones de flora y fauna que interactúan entre sí para su propio beneficio, entre los principales biomas terrestres podrás encontrar:
Bosques
Los bosques se clasifican en bosques tropicales, bosques templados y bosques boreales. En estos hábitats se pueden encontrar un gran número de especies, tales como monos, ciervos, pájaros, felinos como el jaguar, búhos, entre otros.
Desiertos
Los desiertos cubren alrededor del 20% de la superficie de la Tierra y se caracterizan por ser hostiles para la mayoría de la vida como la conoces, además, las lluvias rara vez caen sobre los desiertos, lo que supone menos de 40 milímetros anuales.
Sin embargo, algunas especies y plantas se han adaptado a este tipo de bioma y podrás encontrar animales como los camellos, coyotes, lagartos, el zorro del desierto, aves como el correcaminos, entre otras especies.
Tundras
Se trata de uno de los biomas con más bajas temperaturas, haciéndolos muy fríos, en donde las lluvias no son frecuentes, pero cae mucha nieve.
Estos biomas se dividen en tundras árticas y tundras alpinas, en ellas se han desarrollado hábitats que son el hogar de animales como los renos, la liebre del ártico, los osos polares, el zorro del ártico, etc.
Selvas
Se trata de uno de los biomas más importantes para la vida en el planeta, albergando la mayor cantidad de especies animales y vegetales del mundo, además, cubre algo más del 8% de la superficie.
Este bioma se divide en selvas tropicales y selvas templadas, encontrándose en ellas animales como los jaguares, armadillos, chimpancés, serpientes como la mamba negra, tapires, leopardos, entre otros.
Sabanas
Las sabanas están caracterizadas por tener pocos árboles o bien, tienen diversidad de árboles de menor tamaño, llamados arbustos. Este bioma es el intermedio entre los desiertos y las selvas tropicales, teniendo un poco de estos dos biomas.
Las sabanas han desarrollado hábitats en los que las grandes especies del reino animal han florecido y evolucionado, tales como los elefantes, guepardos, leones, hienas, antílopes, cebras, búfalos, etc.
Montañas
Las montañas ocupan otro 20% de la superficie de la Tierra, sirviendo de hábitats idóneos para muchas formas de vida que no pasan desapercibidas para nadie. Las montañas tienen un papel fundamental en el ciclo del agua, vital para la supervivencia de todas las especies del mundo, incluidos los humanos.
Los pumas, halcones, águilas, osos panda y la cabra de montañas son solo algunos animales que viven en este bioma.
¿Cómo se clasifican los animales terrestres?
La clasificación de los animales terrestres puede ser de todo, menos sencilla, ya que entre las pocas cosas que los hacen comunes, es que viven fuera del agua, en las masas continentales.
Incluso, existen especies que necesitan del agua para cumplir con sus ciclos reproductivos y animales que hacen vida en los dos entornos, tanto el acuático como el terrestre.
Una de las clasificaciones más aceptadas es de acuerdo al hábitat en donde viven.
- Animales de la superficie terrestre; son aquellos que están diseminados en toda la superficie de la Tierra. Es decir, los que encuentras en desiertos, selvas, bosques, tundras, sabanas, estepas y montañas.
- Subterráneos; son las especies que prosperan en el subsuelo y capas más inferiores de la Tierra.
- Arborícolas; son los animales que sobreviven en los árboles, allí se alimentan, duermen, crecen y se aparean.
- Rupícolas; animales terrestres que sobreviven en las rocas de cualquier bioma.
- Troglobitas; son los animales que prosperan dentro de cuevas y cavernas.
- Arenícolas; especies que viven en superficies arenosas y de grava.
- Voladores; animales que tienen alas y que pueden migrar hacia otros biomas, por ejemplo: pueden volar desde una selva hasta una montaña.
Animales terrestres conocidos
Los animales terrestres son los más estudiados de todo el globo, sobre todo, en comparación con las múltiples especies marinas, de las cuales muchas siguen siendo un misterio.
Cada especie prospera a su manera en cualquier hábitat continental y juegan un papel fundamental en los ecosistemas propios de cada región. Por esta razón, seguramente conoces a algunos animales distintivos de cada hábitat del mundo.
El oso polar
Se trata del mamífero carnívoro más grande que vive en la superficie de la Tierra, es un animal que vive en las zonas del ártico, en el polo norte.
Es un carnívoro exclusivo, alimentándose de renos y focas. Se caracteriza por su enorme tamaño, sus largas y poderosas patas, una cara alargada y una cola corta, además, su pelaje es totalmente blanco.
Los lobos
Son animales carnívoros que viven en el norte de América y en la gran zona euroasiática. Su tamaño y peso son realmente considerables y no tiene enemigos naturales, excepto los seres humanos.
Su reproducción se lleva a cabo mediante la copulación vivípara y consume casi exclusivamente carne de otros mamíferos.